El Mono de Nieve.

Mi plan ya comenzó a hechar frutos...ese plan en el que no permitiría que los grandes momentos hechos con pequeños detalles, no estuviesen en mi vida. Eso si, nada es gratis en esta vida!!!....y no hablo precisamente solo del dinero, si no que tambien me demanda esfuerzo físico y mental....
Mi propósito inicial fue regalarle a mis hijos un dia inolvidable, asi que aspiré profundo y despeje mi mente de problemas cotidianos y otros no tanto...y me aventuré con ellos en dirección hacia la cordillera de los andes, a un hermoso lugar llamado Portillo. A medida que ibamos subiendo la empinada cumbre de montañas salpicadas de manchas blancas, los ojitos de mi Pequeñita se iluminaban y se abrían como dos pelotitas de pin pon...saltaba y gritaba emocionada. Mi hijo mayor ya habia experimentado este descubrimiento dos años atras, asi que cual hermano mayor, conocedor de los misterios de la nieve...le iba explicando a medida que avanzabamos, como llegaba la nieve a las montañas, como se derretia por efecto del sol...etc, etc...su hermanita lo miraba con admiración y lo alentaba con nuevas preguntas lo que mi hijo agradecía con ingeniosas respuestas...Una vez que aterrizamos en el manto blanco, mis hijos fueron a conquistar tierras nevadas instalando su primer monumento...El Mono de Nieve!! el cual quedó inmortalizado junto a sus creadores, orgullosos de su obra y yo por mi parte, orgullosa de los míos. Mi único anhelo, es que este día sea inmortal en sus memorias, ayudados por lo impresionables que suelen ser los infantes ante un nuevo evento o descubrimiento. Intimamente espero, que hallan aprendido que se puede ser inmensamente feliz con un poco de nieve y la mejor compañía del mundo.....la familia. Gracias Monito!!!!